
En los países de tradición católica, se celebra el 1 de noviembre; mientras que en la Iglesia Ortodoxa se celebra el primer domingo después de Pentecostés; aunque también la celebran las Iglesias Anglicana y Luterana. En ella se venera a todos los santos que no tienen una fiesta propia en el calendario litúrgico. Por tradición es un día festivo, no laborable.

Hasta nuestro bonito cementerio, enclavado en un lugar privilegiado, se acercan numerosas personas para rezar a sus familiares. Este día sirve para ver a mucha gente que viene de fuera y recordar otros tiempos. Entre los temas de conversación figuran la necesidad de un tanatorio, e incluso un despacho de flores al lado de la entrada. Esperemos verlos pronto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario