Fútbol: Hoyo logra un empate a tres contra Pozuelo

Era el primer partido de la temporada 2012-2013 y los nervios previos afloraban en ambos equipos. Hoyo estrenaba su ascenso a primera regional de aficionados en el campo de Pozuelo y tenía el reto de hacer un partido que hiciera ver que afronta el nuevo curso con ganas y buenos deseos. A pesar de todo, incluso del calor reinante (32 grados al terminar el partido, 20,30 horas), misión cumplida: empate a tres.Ver clasificación.
Saltaban al campo Pecas, Alex, Toni, Boris, Dani, Javichu, Borja, Manu Carnicero, Mejías, Ahmed y Álvaro. También tuvieron sus minutos Verdú, Manu, David y Jesús. Entrenador: Oscar Guerras Mosqui. Delegado: Barrola, en sustitución de Paco "Chino", que siguió el partido minuto a minuto desde tierras andaluzas.

El colegiado dio inicio al partido y no llegó al minuto cuando Manu Carnicero, que mantiene su excelente nivel de juego, sorprendió al portero con un gol que hizo levantar a la grada, por cierto muy concurrida por aficionados de la verde. Era el 0-1. Seguidamente, la fuerza del Hoyo se hizo patente con buenas jugadas y toques estilo Barça que agradaban la vista de los espectadores, hasta que el jugador número 8 del Pozuelo  aprovechó un fallo de la defensa e irrumpió en la portería de Pecas. Las esperanzas se aplacaron.
El partido se fue igualando y las oportunidades se fueron dando en ambos equipos. Carnicero, en dos ocasiones, alcanzó el travesaño mientras los aficionados se echaban las manos a la cabeza.
El desajuste vino tras una mano no pitada a un jugador del Pozuelo, el juego terminó en corner y tras él un penalti y amarilla a Boris. Era el 2-1.
Después otro saque de esquina desencadenó el 3-1, desde los pies del número 3 del Pozuelo. Sin duda el Pozuelo alardea de una delantera muy rápida y que sabe aprovecharse de los fallos de la defensa contraria. Pero todavía quedaba mucho tiempo, que los verdes han sabido muy bien aprovechar.

El revulsivo del Hoyo vino del juego de Verdú, que salió al campo en la segunda parte. Llegó y besó el santo, provocando un penalti que encajó Álvaro. Pero la gesta de Verdú siguió y siguió hasta meter su propio gol. Culminaba así el partido con 3-3, un puntito que no viene nada mal.
El próximo partido en casa, arropados por una afición que se desplaza a seguir al equipo, vaya donde vaya.