La penúltima salida de la temporada De Hoyo al Cielo tuvo que luchar con la incertidumbre de su celebración a causa de un día climatológicamente raro con más nubes que sol. La convocatoria, numerosa como siempre, no dudó en emprender la marcha hasta el Rancho de la Praeruela, lugar elegido para la observación. Una vez allí, el cielo se despejó ante nuestros ojos, dejando al descubierto una noche oscura (por la falta de luna), iluminada por millones de estrellas.
Nuestro experto astronómico Manuel Marín fue descubriendo con su rayo laser las diferentes constelaciones, con sus estrellas más importantes, recorriendo los puntos cardinales a partir de la Estrella Polar. Así pudimos observas la Osa Mayor, la Menor, Casiopea, los planetas Marte y Saturno, el triángulo de verano, Perseo, y, por supuesto, la estrella que más brilla actualmente, que es Arturo, encargada de cuidar de las Osas, según la mitología griega.
Posteriormente Ana García Castellano nos deleitó con varios cuentos relacionados con la astronomía, que cautivaron a niños y adultos.
Finalmente, como es habitual, se sirvió una limonada para coronar una noche mágica, en la que tampoco faltaron dos estrellas fugaces.
En la imagen de la izquierda, Ana García Castellano, Marisa Baelo (Cosas de Hoyo) y Manuel Marín.
La próxima salida será el 23 de septiembre. De Hoyo al Cielo está organizado por el blog Cosas de Hoyo, el Ayuntamiento de Hoyo de Manzanares, con la colaboración de La Librería de Hoyo y El Portalón.
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