En menos de siete días, los chicos y las chicas de Hoyo de Manzanares protagonizaron en las gradas del campo de Las Eras unas jornadas de animación de los equipos cadete y juvenil que han sido elogiados por muchas de las personas que asistieron a sendos partidos, incluidos los dos árbitros que dirigieron los encuentros.
Con sus cánticos, sus banderas, su bombo y sus pancartas, le dieron al campo de fútbol de Hoyo un colorido que había desaparecido por completo de este pueblo. No es fácil llenar la grada, cantar sin parar, aplaudir los goles y terminar respetando a todos los jugadores aunque el equipo de casa pierda o empate. Eso ocurrió en Las Eras y todos esperan que continúe. El deporte necesita de gente así.
Con sus cánticos, sus banderas, su bombo y sus pancartas, le dieron al campo de fútbol de Hoyo un colorido que había desaparecido por completo de este pueblo. No es fácil llenar la grada, cantar sin parar, aplaudir los goles y terminar respetando a todos los jugadores aunque el equipo de casa pierda o empate. Eso ocurrió en Las Eras y todos esperan que continúe. El deporte necesita de gente así.
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